Por Adriana López
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26 de marzo de 2023
El tiempo , es caprichoso y siempre quiere hacer las cosas a su manera. No le gusta empezar la semana, los lunes, suele estar cansado y la pereza es participe de cada movimiento, haciendo que cada segundo cuente y los minutos sean eternos. Después de comer siempre se echa la siesta y se le olvida contar las horas. Le gustar ver tiritar, por lo que cuando hace frío, directamente, se paraliza. En los conciertos suele emocionarse y sus pulsaciones se aceleran a buen ritmo. También le ocurre cuando escucha risas, y los segundos y minutos no dejan casi ni rastro de haber pasado por allí.